José Moreno Villa, una
colección inesperada. Fondos del Museo de Málaga.
Museo de Bellas
Artes de Granada. Palacio de Carlos V – Alhambra.
Comisariado de
Ricardo Tenorio Vera, director Museo Bellas Artes de Granada, Emilio Escoriza
Escoriza y María Encarnación Sánchez Torrente, conservadores.
Colaboración de
María Morente del Monte, directora del Museo de Málaga, José Ángel Palomares
Samper, conservador, y Amor Álvarez Rubiera, restauradora.
19 de julio al
15 de septiembre de 2013.
Presentación de
la exposición por el Consejero de Cultura y Deporte, Luciano Alonso, junto a la
Directora de la Alhambra, Mª del Mar Villafranca, la Directora General de
Bienes Culturales e Instituciones Museísticas, Elia Rosa Maldonado, el Director del
Museo de Bellas Artes de Granada, Ricardo Tenorio, la Delegada Territorial de
Educación, Cultura y Deporte de Granada, Ana Gámez, y la Directora del Museo de
Málaga, María Morente.
Dentro del programa “Los Museos viajan”
de la Consejería de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, en el Museo de
Bellas Artes de Granada se exhiben cuarenta del medio centenar de obras de José
Moreno Villa (Málaga, 1887 – México, D.F., 1955), depositadas por el Instituto
“Diego Velázquez” en el Museo de Málaga en torno al año 1961 por indicación del
historiador del arte y director del centro, Diego Angulo. Desde ese año, el
conjunto más completo de obras pictóricas de Moreno Villa reunido en España de
entre su producción entre 1924 y 1953 es seña de identidad del Museo
malacitano, hoy reivindicado como un intelectual de elevada talla y prolífico
autor de una producción que incluyó casi todos los medios de expresión
cultural.
Reconocido como uno de los
intelectuales españoles que más favorecieron la introducción en nuestro país de
las Vanguardias europeas, venciendo los dogmatismos que pretendían el
mantenimiento de unos patrones plásticos anclados en los academicismos
decimonónicos, hoy es uno de los autores más solicitados de entre los que se
encuentran en el Museo de Málaga, tanto por su papel como crítico y ensayista
de Arte como por su directa producción pictórica, que transitó desde las
simplificaciones cubistas, a las elucubraciones surrealistas y a la
coincidencia con algunos movimientos nacionales de vanguardia, como la Escuela
de Vallecas.
Desde su participación en la madrileña Exposición
de Artistas Ibéricos en 1925, reunión de los mejores pinceles de la vanguardia
nacional, José Moreno Villa fue reclamado como uno más de sus integrantes
plásticos. Tras su exilio mexicano, la crítica artística lo olvidó a favor de
su producción literaria, aunque esta faceta no decayó en los largos años del
exilio, donde su personal universo plástico se fue enriqueciendo de indigenismo
y amplió su paleta con rabiosos colores americanos. La selección granadina no
supera los umbrales del exilio español, fondos que constituyen el grueso de esa
colección inesperada a la que alude su título, un conjunto homogéneo en su
presentación pero diverso en los motivos que lo pueblan y las tendencias
plásticas en las que se inspira. Una ocasión formidable para poder apreciar la
producción del pintor antes de su reinstalación en el Palacio de la Aduana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario